Generalmente, se encuentran todos en la misma línea de proceso, y se pueden considerar opcionales, si son procesos de aspecto, u obligatorios, si son necesarios para una correcta calidad final de la capa.
Los tratamientos químicos que se pueden encontrar en una línea de anodizado son los siguientes:
- Desengrase: Es la primera etapa del proceso y es indispensable para la obtención de una superficie limpia y bien preparada para etapas posteriores. Esta limpieza se realiza mediante agentes detergentes y emulsionantes de carácter ácido o alcalino.El acabado de anodizado directo necesitará únicamente el pre-tratamiento de desengrase.
- Abrillantado: El objetivo de este proceso es la obtención de una superficie especular, mediante un ataque químico o electrolítico que suaviza la rugosidad superficial desde un punto de vista microscópico. Esto se consigue mediante dos posibles procesos:
- Pulido o abrillantado químico: mediante un ataque de una mezcla de ácidos fosfórico, sulfúrico y nítrico concentrados a 100 ºC de temperatura se obtiene una superficie lisa y brillante.
- Pulido o abrillantado electrolítico: al efecto químico de una mezcla de ácidos fosfórico y sulfúrico se le suma el efecto de la aplicación de corriente continua anódica sobre la superficie. En general se obtiene un brillo superior al pulido químico pero son más visibles los posibles defectos del aluminio base.
- Matizado: En este proceso se busca obtener una superficie mate con un acabado fino mediante la formación de una rugosidad superficial controlada. Esto se consigue en soluciones de hidróxido sódico con aditivos estabilizantes del aluminio para su correcta disolución.